Desde hace algún tiempo me encuentro comprometido con el desarrollo del emprendimiento en nuestro país. Estoy supremamente entusiasmado con la época que nos tocó vivir y el cúmulo de oportunidades que representa. Constituye un período de cambio disruptivo, con una transformación en tan corto tiempo, como nunca se había visto en la historia de la humanidad.
En los próximos 10 años sucederá tanto cambio como el ocurrido en los últimos 100 años.
La economía ha cambiado radicalmente con el advenimiento de la economía digital. Hoy, todas las empresas más grandes del mundo se gestaron con el nuevo cambio tecnológico. El crecimiento de Internet y de las comunicaciones ha permitido el surgimiento de nuevas empresas, líderes en la economía global. La vida de cada uno de nosotros se ha transformado de forma irreversible.
Sin embargo, el verdadero cambio está por venir. Están en pleno desarrollo nuevas tecnologías como el Blockchain, el Internet de las Cosas, la Inteligencia Artificial, la Computación Cuántica, la Nanotecnología, la Realidad Virtual y la Realidad Aumentada, la Robótica, la Impresión en 3D, etc. Cuando maduren estas tecnologías, entraremos en lo que se denomina la Convergencia de Tecnologías, por lo que la innovación y el cambio empresarial crecerá exponencialmente.
Es el momento en el que los emprendedores tendrán que enfrentar con entusiasmo los desafíos venideros, llenos de oportunidades y de retos. Nunca habían existido más recursos económicos, los cuales son ilimitados para los emprendimientos excelentes. Pero ahora nuestros competidores pertenecen al mundo globalizado y la carrera resulta más compleja y concurrida.
Resulta preocupante que Colombia sea tan solo el país No. 67 en innovación en el mundo, por lo que es mucho el trabajo que aún está por delante, los primeros nos llevan una enorme ventaja. Somos creyentes de la gran capacidad de nuestro talento humano. El primer cambio está en nuestros modelos mentales y en el convencimiento de que podemos competir ventajosamente con nuestro talento y con las ventajas comparativas que la naturaleza le ha dado a nuestro país.
Este es un llamado al optimismo y a la acción de todos nuestros emprendedores.
Estoy profundamente comprometido con este propósito.
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